![](https://static.wixstatic.com/media/11062b_7fb923cf2d6748e195e980d74c4059f2f000.jpg/v1/fill/w_1920,h_1080,al_c,q_90,enc_avif,quality_auto/11062b_7fb923cf2d6748e195e980d74c4059f2f000.jpg)
![](https://static.wixstatic.com/media/2a4453_71f4a29619234fb888ef5be9c5b6fe1e~mv2_d_12617_2794_s_2.png/v1/fill/w_1912,h_421,al_c,q_90,usm_0.66_1.00_0.01,enc_avif,quality_auto/2a4453_71f4a29619234fb888ef5be9c5b6fe1e~mv2_d_12617_2794_s_2.png)
![]() DSC_0396-39 | ![]() DSC_0405-41 | ![]() DSC_0406-42 |
---|---|---|
![]() DSC_0402-40 | ![]() DSC_0413-47 | ![]() DSC_0407-43 |
![]() DSC_0412-46 | ![]() DSC_0415-48 | ![]() DSC_0408-44 |
El Parque Romero fue inaugurado el 20 de julio de 1910 en memoria del padre Francisco Romero, sacerdote que impulsó el cultivo del café en Santander, imponiendo como penitencia a sus fieles sembrar el cierto número de matas según la cantidad y gravedad de sus pecados.
Por estar frente al Cementerio Central, es un sitio de gran peregrinación donde en medio de naturaleza y monumentos, se encuentran personajes como Matilde Díaz, vendedora de flores desde hace 60 años.
Parque Romero
![](https://static.wixstatic.com/media/2a4453_275c2e5b4e954c2e85f8f6a283fb86e0~mv2_d_3264_4928_s_4_2.jpg/v1/fill/w_600,h_906,al_c,q_85,usm_0.66_1.00_0.01,enc_avif,quality_auto/2a4453_275c2e5b4e954c2e85f8f6a283fb86e0~mv2_d_3264_4928_s_4_2.jpg)
OBELISCO
SEMBRADORES DEL BIEN
Hacia el norte, se lee un tributo al religioso, quien fue amigo y confesor de Simón Bolívar. La inscripción dice: “Al ilustre naturalista presbítero Doctor Eloy Valenzuela, austero y generoso varón quién tuvo siempre el corazón en Dios y las manos en el trabajo que dignifica”.
En la cara que mira al sur, se inscribió un tributo al sacerdote, quien fue pieza fundamental en el desarrollo de Bucaramanga. “En memoria del progresista y ejemplar sacerdote Doctor Francisco Romero, quien con su vida de fecunda actividad demostró que la estricta labor evangélica puede adunarse con el empeño tenaz por el desarrollo industrial y económico”.
En el extremo que mira al occidente, se lee una inscripción que es un tributo a los buenos habitantes del departamento: “A los nobles sembradores del bien en Santander, el pueblo de Bucaramanga agradecido”.
En el lado oriental, se rinde homenaje a los que se sacrificaron en búsqueda de la libertad. Esto dice la inscripción: “Tributo de Bucaramanga a los héroes y mártires de la Independencia nacional en el primer centenario del día glorioso Julio 20 de 1910”.
Es uno de los primeros que se erigió en Colombia. Es un pilar de piedra labrada, mármol y granito de cuatro caras iguales, un poco convergentes, que termina en una punta piramidal. La obra de Miguel Vicente Rueda se inauguró el 20 de julio de 1910, como parte de la celebración del centenario del Grito de Independencia. En cada uno de sus cuatro lados se plasman diferentes historias.